Mujeres afrodescendientes
Una de las conclusiones que hemos
constatado es que, sin duda la práctica religiosa forma parte del proceso
identitario de las mujeres afrodescendientes. Pero, ¿qué sabemos de estas
mujeres? ¿cómo son? ¿qué vida llevan? ¿qué tipo de discriminaciones sufren?
Lo cierto es que, la mayor parte de la historia de estas mujeres, se ha esquivado en el mundo académico, aunque gracias al impulso de algunas de ellas y a las nuevas preocupaciones del movimiento feminista, podemos comprobar que los estudios sobre al respecto han ido creciendo durante los últimos años del siglo XX.
Lo cierto es que, la mayor parte de la historia de estas mujeres, se ha esquivado en el mundo académico, aunque gracias al impulso de algunas de ellas y a las nuevas preocupaciones del movimiento feminista, podemos comprobar que los estudios sobre al respecto han ido creciendo durante los últimos años del siglo XX.
Sin duda, la historia de las
mujeres afrodescendientes está totalmente ligada con la colonización de America
Latina. El colonialismo consiguió legitimar la dominación de los nativos y esclavos, y de sus culturas e identidades, debido a que construyó un
sistema jerárquico basado en la raza, codificando el color de la piel de las
personas. Y es que la raza, ha conseguido perpetuarse como un sistema de segregación que
persiste en el tiempo y que conlleva desigualdades muy notorias. Las
opresiones de raza se juntan, para las mujeres afrodescendientes, con las
opresiones de género y, generalmente, también con las de clase. Todo esto da
como resultado una América Latina eurocentrista y androcéntrica que llega
hasta nuestros días, donde los hombres blancos ocupan una condición
privilegiada en la estructura económica, política y social, sobre las mujeres
en general y, en particular, sobre las mujeres negras y afrodescendientes
(CEPAL, 2018).
Esta eurocentrismo hegemónico
podemos comprobarlo en todos los aspectos de la vida de las mujeres
afrodescendientes. Como ejemplo, vamos a acercar una pequeña reflexión acerca de
las mujeres escritoras, y es que como ocurre en la mayor parte del mundo, fueron
acalladas durante mucho tiempo.
Una de las primeras escritoras afrodescendientes fue María Fimúna dos Reis (Brasil, 1825-1917), con su obra Úrsula (1859). Es una novela muy poco conocida en el medio intelectual de Brasil, y mucho menos en el resto de Latinoamérica. Sin embargo, es probablemente una de las primeras de la literatura brasileña: un romance abolicionista, escrito desde la doble perspectiva de mujer y de negra por su autora. Y es que desde ese punto de vista, dos veces marginal, la autora elabora un discurso muy diferente al que sería elaborado por la literatura hegemónica e impuesta en el imaginario dominante de la nación brasileña. La escritora hace una sutil denuncia de la situación femenina y al nivel de educación que le es vedado a la mujer, del estrato social que sea (BURGUEÑO, 2006). En las novelas brasileñas, la literatura de autoría masculina construyó a la mulata como apetitosa, emblemática de la subyugación y sexualización de la mujer afrobrasileña. Ella es transformada en plato nacional, con un cuerpo que casi se expone para consumo, un objeto exorbitante de energía y sexualidad, que alimenta el imaginario social eurocéntrico de Brasil (STEVENS, 2017). Dos Reis participó de la lucha antiesclavista, creando imágenes textuales que le devuelven a las etnias afro la personalidad y la identidad, es esa identidad por la que luchan a diario las mujeres afrodescendientes.
Una de las primeras escritoras afrodescendientes fue María Fimúna dos Reis (Brasil, 1825-1917), con su obra Úrsula (1859). Es una novela muy poco conocida en el medio intelectual de Brasil, y mucho menos en el resto de Latinoamérica. Sin embargo, es probablemente una de las primeras de la literatura brasileña: un romance abolicionista, escrito desde la doble perspectiva de mujer y de negra por su autora. Y es que desde ese punto de vista, dos veces marginal, la autora elabora un discurso muy diferente al que sería elaborado por la literatura hegemónica e impuesta en el imaginario dominante de la nación brasileña. La escritora hace una sutil denuncia de la situación femenina y al nivel de educación que le es vedado a la mujer, del estrato social que sea (BURGUEÑO, 2006). En las novelas brasileñas, la literatura de autoría masculina construyó a la mulata como apetitosa, emblemática de la subyugación y sexualización de la mujer afrobrasileña. Ella es transformada en plato nacional, con un cuerpo que casi se expone para consumo, un objeto exorbitante de energía y sexualidad, que alimenta el imaginario social eurocéntrico de Brasil (STEVENS, 2017). Dos Reis participó de la lucha antiesclavista, creando imágenes textuales que le devuelven a las etnias afro la personalidad y la identidad, es esa identidad por la que luchan a diario las mujeres afrodescendientes.
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18 de noviembre en Brasil, llamando a la protección de los Derechos Humanos |
Podemos sintetizar que las mujeres afrodescendientes se
enfrentan en su vida a múltiples dificultades y estigmas, algo que se pone aún
más de relevancia cuando conocemos datos como que en Brasil, por ejemplo, las mujeres
negras constituyen el 62% de los trabajadores domésticos del país. Más del 70% de estas no tiene un contrato formal de trabajo.
Además, el 60% de las mujeres que mueren durante el parto son negras. Y los
datos oficiales indican que en los últimos diez años el número de asesinatos de
mujeres negras aumentó el 54% (AZEVEDO, 2015).
Seu nome era dor
Seu sorriso
dilaceração
Seus braços e pernas,
asas
Seu sexo seu escudo
Sua mente libertação
Nada satisfaz seu
impulso
De mergulhar em prazer
Contra todas as
correntes
Em uma só correnteza
Quem faz rolar quem tu
és?
Mulher!
(Beatriz Nascimento
– "O Sonho")
Por todo lo dicho creemos hacía
falta un acercamiento a estas mujeres afrodescendientes para comprender que en la defensa de su cultura y su religión, están manifestando activamente su desacato a
la hegemonía eurocentrista y patriarcal que las oprime, continuando con su
legado como una forma de no silenciar su
pasado y reivindicarlo como propio.
y por ahí nos llaman ‘minorías’
y sin embargo
nos sigo viendo
(Nancy Morejón - "Cimarrones")
Por: Sandra P.
BIBLIOGRAFIA:
AZEVEDO, C. (2015). Las mujeres afrobrasileñas salen a la
calle. ¿Por qué no ocupar también escaños en el Parlamento?. Retrieved from
https://www.undp.org/content/undp/es/home/blog/2015/11/27/Afro-Brazilian-women-are-taking-to-the-streets-How-about-also-taking-up-seats-in-Parliament-.html
BURGUEÑO, C. (2006) Úrsula: Identidad Cultural Afro y Crítica a la Situación de la Mujer en el Brasil de Mediados del Siglo XIX. Cincinnati Romance: 159-175.
CEPAL. (2018). Mujeres afrodescendientes en América Latina y el Caribe. Deudas de igualdad. Santiago: Naciones Unidas.
STEVENS, C. (2017). (RE)ESCRIBIENDO EL DOLOR. ESCRITORAS NEGRAS CONTEMPORÁNEAS. Contextos: Estudios de humanidades y ciencias sociales: 169-183
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